¿Podrías imaginarte vivir en un paraíso donde nunca se acerca el invierno? Las Islas Canarias son un lugar así. A tan solo tres horas en avión hacia el sur desde el aeropuerto de Madrid, este archipiélago está situado a solo cien kilómetros de la costa del Sahara, al oeste de África. Su ubicación privilegiada hace que la temperatura aquí se mantenga estable entre los 18ºC y los 24ºC. Enero es un momento tan bueno como el mes de agosto para bucear en las aguas de Las Canarias. Las islas han sido también un área de intensa actividad volcánica. Las erupciones volcánicas fueron las causantes del nacimiento de cada una de las islas, hace millones de años. Puedes encontrar volcanes de todos los tamaños en cualquier lugar que mires en este archipiélago. Además, en las islas más grandes como son Tenerife y Gran Canaria, sus altas montañas volcánicas en el centro de las islas actúan como barrera contra el viento y provocan la creación de microclimas, de modo que el clima en el norte de ambas islas puede ser completamente diferente al sur. Pero es precisamente la intensa actividad de la madre naturaleza, a través de descargas de magma volcánico, la que ha creado aquí un paisaje de de intensa belleza y magia. Pocas cosas son comparables en el mundo al poder dar un paseo por el Parque Nacional del Teide en Tenerife o por los alrededores del Parque Nacional de Timanfaya en Lanzarote. Los primeros exploradores españoles que descubrieron las islas en el siglo XV, quedaron impresionados por el encanto de las islas y por su clima perfecto para el cultivo. Llamaron al archipiélago las islas afortunadas. Esto ocurrió justo antes del descubrimiento de América. Por tanto, las Islas desempeñaron un papel muy importante en la expansión americana de españa como un punto de parada intermedia para los buques que se dirigían hacia el oeste. De hecho, muchos canarios participaron en la conquista de las Américas y como consecuencia, el castellano hablado en gran cantidad países latinoamericanos suena de forma muy similar al utilizado en las Islas Canarias. También por esta razón, los platos típicos canarios también se pueden encontrar, con algunas variaciones, en algunos de los países hispanos de Latinoamérica. Si das un paseo por cualquier pueblo de Las Canarias, también puedes notar esta influencia americana: estás claramente en una ciudad europea, pero la arquitectura, las costumbres, la forma de hablar, la calidez y la tolerancia de la gente, pueden recordarte de algún modo al Caribe. Si decides comprar una casa lejos de tu hogar en las Islas Canarias, tú también serás afortunado. Podrás vivir en un paraíso todo el año y, con siete islas diferentes que tienen cada una su propia personalidad, podrás incluso elegir un paraíso a tu gusto. Todas las islas tienen aeropuertos y ferris que las conectan entre si, lo que resulta muy conveniente. Sin embargo, los aeropuertos de El Hierro, La Palma y La Gomera son únicamente interinsulares. La mayoría de los residentes internacionales se encuentran en Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote, mientras que las nacionalidades más numerosas son los británicos, italianos, alemanes, belgas y noruegos. En estas tres islas más pobladas, tienes dos opciones: puedes decidirte por vivir cerca de tus compatriotas en alguna de los núcleos más grandes y disfrutar de las increíbles playas, deportes acuáticos, rutas de senderismo y accesos a fantásticos Parques Nacionales; o bien puedes buscar tu particular pueblo canario típico y vivir una vida cómoda completamente integrado con los isleños. Fuerteventura, La Palma, La Gomera y El Hierro aún no se han convertido en el objetivo de los turistas. Sin embargo, ofrecen una belleza intrínseca y una personalidad propia que hará que te enamores de ellas. En estos lugares más recónditos, puedes sentirte afortunado de poder poseer un pedazo de paraíso sólo para ti.
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