Pareado de obra nueva con fantásticas vistas al mar en Bahia Azul Este nuevo y moderno pareado de estilo mallorquín se está construyendo actualmente en una tranquila calle lateral en el corazón de Bahía Azul, no lejos de los encantadores acantilados del sur. Cada casa se distribuye en dos plantas y una azotea, a la que se puede acceder desde la planta superior a través de una escalera. En la planta baja encontrará un salón-comedor abierto con cocina e isla para cocinar con acceso a la terraza parcialmente cubierta. Además, en la planta baja hay un guardarropa con armario empotrado, un aseo para invitados y un almacén con sala de máquinas, conexión para lavandería y sitio suficiente para frigoríficos adicionales. Hay tres dormitorios dobles en la planta superior. El dormitorio principal tiene baño en suite y los otros dos dormitorios comparten baño. Desde los balcones uno tiene una maravillosa vista al mar. La azotea es el lugar ideal para disfrutar de la vista de la Bahía de Palma y la puesta de sol. Otras características: ventanas de aluminio de Climalit, persianas, aire acondicionado frío/calor, calefacción por suelo radiante en todas las habitaciones (regulable individualmente), modernas unidades de control Airzone para aire acondicionado/calefacción, pre -instalación de sistema solar para calentamiento de agua, sistema de descalcificación, zona ajardinada con riego automático, piscina de agua salada totalmente automática con ducha exterior. La urbanización de Bahía Azul/Bahía Grande se encuentra en la costa del municipio de Llucmajor. Tiene todo lo necesario para vivir el día a día: pequeñas tiendas, restaurante y bares, centros médicos, etc. Este litoral se caracteriza por los acantilados de vértigo y las pendientes que conducen hasta el mar Mediterráneo. Dispone de una pequeña zona de baño formada por s’Arc de Sant Martí. Esta cala de rocas es un lugar tranquilo donde bañarse y no preocuparse. Gusta por ser una playa “privada” y sus puestas de sol son impresionantes. El acceso a la zona de baño se realiza por una escalera de madera pasando por zonas de sombra y sol. A lo largo de los siglos este camino sirvió de acceso a la costa a pescadores, piratas y, sobre todo, contrabandistas. Los acantilados también fueron aprovechados para la extracción del marés (piedra arenisca de tonos dorados o rosáceos), una constante en el paisaje mallorquín meridional y que se utilizó para la construcción de la Catedral de Palma. La capital se encuentra a solo unos 20 minutos en coche y el aeropuerto está a aprox. 15 minutos.