Estás en la terraza de un chiringuito disfrutando de una fría sangría y cuando terminas, das un agradable paseo por una zona no construida rodeado de dunas. Esto puede ser tu día a día si decides comprar un piso o una casa en Tabernes de la Valldigna. Pasar de una playa corriente con chiringuitos a otra donde la serenidad reina en su arena dorada. Para todos los gustos. Las conexiones al Aeropuerto de Valencia son cómodas debido a estar a 70 km de distancia, es decir, una hora en coche o una y 30 minutos en tren. Si decides comprar una propiedad en Tabernes de la Valldigna, un día cualquiera puede comenzar con un desayuno valenciano en el pueblo, por ejemplo, en el Restaurante Delicias en el que degustaremos sus deliciosas tartas caseras. De ahí nos vamos caminando a través de una ruta de tierra a la famosa Cueva de Bolomor. Esta cueva representa un lugar crucial para descubrir los orígenes y las características del poblamiento paleolítico europeo, las formas de vida de los neandertales y de otros homínidos que les precedieron. Cuando hemos disfrutado de un descanso merecido, es hora de caminar a la playa a través de algarrobos y pinos blancos. Al llegar a la playa, podemos disfrutar de la Torre Atalaya, también llamada torre La Vall. Esta torre fue encargada por Felipe II en el año 1575 con el fin de defenderse de los frecuentes ataques de piradas y corsarios que llegaban arrasando cultivos y saqueando pueblos. Para terminar, ¿qué mejor opción que darse un baño mientras vemos una de las mejores puestas de sol del mediterráneo en un paraje prácticamente virgen y así, reconciliarse completamente con la naturaleza?
