En 1919, al finalizar la primera guerra mundial, el escritor británico Gerald Brenan se instaló en Yegen, un pequeño pueblo de la Alpujarra granadina con poco más equipaje que cientos de libros transportados por mulas. La presencia de un inglés de alta clase y cultura impuso en la cerrada sociedad rural de un pueblo alpujarreño un contraste de carácter cómico y revelador. Varias décadas después, el escritor dejaría sus observaciones sobre su especial inmersión cultural en la Alpujarra en el libro South from Granada: Seven Years in an Andalusian Village, publicado por primera vez en 1957 con gran éxito, y considerado uno de los mejores libros de literatura de viajes escritos en inglés. Para los que prefieran el cine, una adaptación española con el mismo nombre y en clave de comedia se filmó en el año 2003. El libro de Brenan ha dejado un impacto claro en la Alpujarra de hoy. Inspirados por esta obra, muchos visitantes de las islas británicas y el norte de Europa han sentido la llamada de la Alpujarra, donde han decidido reinventar sus vidas. Hoy en día, numerosos miembros de una creciente comunidad internacional venida del norte de Europa están orgullosos de considerarse alpujarreños. ¿Y qué tiene la Alpujarra para atraer a tantos residentes expatriados? El tipo de visitante internacional de la Alpujarra es aquel que viene atraído por la posibilidad de un contacto diario con la naturaleza en un bellísimo entorno rural y con una comunidad autóctona genuina que manifiesta a diario la honestidad, la alegría y la sencillez de las gentes de los pequeños pueblos andaluces. Es posible que tus vecinos andaluces en la Alpujarra sean al principio un poco más reservados y tímidos respecto al nuevo residente extranjero que los habitantes de la costa, pero con el tiempo establecerás con ellos sólidas amistades. Y todo ello, en un encantador pasaje natural en las faldas de la Sierra Nevada, donde respirarás el mejor aire puro y en el que dispondrás de una impresionante variedad de rutas de senderismo para que no te falte variedad en tus paseos diarios a pie en bicicleta. Si tú también quieres ser un nuevo residente de la Alpujarra, dispones de más de cincuenta pueblos para elegir, cada uno de ellos con su particular personalidad. Un candidato evidente para comenzar la búsqueda de tu pueblo alpujarreño puede ser la capital, Órgiva, (6.000 habitantes, de los que 1.500 son expatriados), en pleno Parque de la Sierra Nevada. Aparte de una gran variedad de opciones de senderismo rural, Órgiva te ofrece en sus iglesias y palacios un conjunto monumental del siglo XVI y XVII. Otra buena opción puede ser Lanjarón, con 1500 habitantes, un pueblo balneario que presume de tener una de las mejores aguas minerales de España.
