Ya desde la distancia, la belleza de Casares te quita el aliento: un pueblo blanco andaluz perfecto, con sus casas colgando desordenadamente sobre la montaña y que muestra con orgullo las ruinas de un castillo árabe de tiempos de la reconquista. Casares es considerado justamente como uno de los pueblos más bonitos de España y es en esta parte de la Serranía de Ronda donde se encuentra un paraíso rural casi olvidado por la fiebre constructora del resto de la costa. Aquí podrás disfrutar de un paisaje fabuloso en tus paseos campestres o practicar tu swing en Casares Costa Golf. El punto fuerte de Casares es que este es el reino perfecto de paz y tranquilidad cuando necesitas alejarte del mundanal ruido. Su punto débil podría ser que a lo mejor hay demasiada paz y tranquilidad para incluso las almas más místicas. Si es así como te sientes, siempre puedes desintoxicarte de tanta tranquilidad en alguna de las discotecas de Marbella más salvajes, que están a tan solo veinte minutos en coche.
